LAS MUJERES QUE AMAN DEMASIADO


Desde pequeñas al escuchar esos maravillosos cuentos de hadas donde siempre la princesa busca al príncipe perfecto para lograr su propia felicidad. Aprendemos a buscar el amor en otra persona  idealizándola, esperando que en algún momento nos hará inmensamente felices y que nos dará todo aquello que soñamos. Tomando el ejemplo de nuestra  familia y el entorno en general.

Frases como: (Te amo con todo mi corazón – Sin ti me muero – Toda mi vida eres tu –Eres lo mejor de mi – Sin ti mi vida no tiene sentido – Me haces falta para respirar... etc.)
¿Te suenan familiares estas frases? ¿Las has pensado? ¿Las has dicho? ¿Las has sentido desde el fondo de tu corazón? 
De esa manera vamos teniendo una idea errónea de los que son las relaciones de pareja, por lo general poco estables, poco cariñosas, llenas de control y de culpa, tal vez violentas y amargadas...

Luego crecemos y por fin llega ese día tan esperado por nosotras de encontrar a nuestro propio “príncipe azul” ¿y... que sucede? nos desvivimos por atenderlo, por cuidarlo, por mimarlo, por cocinarle y por controlarle; es decir seguimos los mismos patrones de conducta aprendidas con la familia y en el medio ambiente que nos rodea. Mal acostumbramos a nuestra pareja a que dependa de nosotras; que somos las mejores, las más perfectas, las idóneas para ellos.

A la par sentimos que sin ese hombre, no podríamos vivir. Nos olvidamos de nuestra persona, de nuestros sueños e ilusiones para dar todo lo que tenemos o incluso lo que no tenemos al “hombre de nuestra vida “con tal que nunca nos abandone. 
Hasta que un día el empieza a tratarnos mal, se harta del control, se amarga con tanta dulzura y no sabemos que pasa si siempre hemos sido tan buenas tan perfectas tan...todo.



Nuestra conducta y pensamientos erróneos:

- Cuando estás enamorada significa sufrir, estamos amando demasiado.

- Cuando la mayoría de nuestras conversaciones son acerca de “él” , de sus problemas, sus ideas, sus sentimientos y cuando casi todas nuestras frases comienzan con “el...” estamos amando demasiado.

- Cuando disculpamos su mal humor, su mal carácter, su indiferencia o sus desaires como problemas debidos a una niñez infeliz y tratamos de convertirnos en su psicoterapeuta, estamos amando demasiado.

- Cuando no nos gustan muchas de sus conductas valores y características básicas, pero las soportamos con la idea de que, si tan solo fuéramos lo suficientemente atractivas y cariñosas, el querría cambiar por nosotras, estamos amando demasiado.

 - Cuando nuestra relación perjudica nuestro bienestar emocional e incluso, quizá, nuestra salud e integridad física, sin duda estamos amando demasiado.



¿Es posible que nuestras ganas tan grandes de amar, nuestros sueños de amor, nuestra desesperación por tener la pareja soñada se pueda convertir en una adicción?
Ser adicto a una persona es algo que solo se puede solucionar en el momento en que como cualquier otra adicción aceptamos que existe este problema y nos hacemos cargo de el. 

Detrás de cada obsesión esta el miedo, el miedo de no ser amadas como deseamos, de que nos abandonen, de perder esa vana ilusión de pensar que ese hombre va a solucionarnos nuestros grandes problemas de la vida, que se haga cargo de nuestros miedos. Y al no lograrlo esos mismos miedos y obsesiones se vuelven tan parte de nosotras que el dar amor para recibirlo de la misma manera se convierte en la meta más grande que da sentido a nuestra existencia.

Desgraciadamente si esto no da los resultados que esperamos lo único que hacemos es AMAR MÁS...AMAR DEMASIADO.



Antes de que sea demasiado tarde para esa relación y que termine de mala manera o se desintegre, se puede hacer mucho al respecto.
Existen varias alternativas. El primer paso es darnos cuenta que tenemos un problema, que el problema radica en nosotras y que en nosotras también esta la solución.

Cuando al fin tomamos el control de nuestras vidas, aprendemos que para dar y recibir amor primero debemos amarnos a nosotras mismas y que nadie tiene la culpa de lo que nos sucede sino que nosotras con nuestras actitudes y miedos hemos atraído esas experiencias y que siempre de una experiencia podemos aprender.
ENTONCES PODEMOS CURARNOS Y AMAR SIN ATADURAS. 

Conceptos: 


*"Como la aterra que la abandonen, hace cualquier cosa para evitar que una relación se disuelva".

*"Acostumbrada a la falta de amor en las relaciones personales, espera, conserva esperanzas y se esfuerza más por complacer".


*"Está dispuesta aceptar mucho más del cincuenta por ciento de la responsabilidad, la culpa y los reproches en cualquier relación".


*"En una relación está mucho más en contacto con su sueño de como podría ser que con la realidad de la situación".


*"Es adicta a los hombres y al dolor emocional".


*"Es probable que se tenga una tendencia a los episodios depresivos, los cuales se trata de prevenir por medio de la excitación que proporciona una relación inestable".


*"No le atraen los hombres que son amables, estables, confiables y que se interesan por usted. Esos hombres 'agradables' le parecen aburridos".



Extraído del libro “Las mujeres que aman demasiado” Robin Norwood)





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